La sesión de fotos con Flamencuria fue un encuentro íntimo y lleno de arte en el estudio, donde el talento de este trío brilló con fuerza. Nieves, con su cautivadora presencia y la emoción de su cante flamenco, logró transmitir toda su esencia frente a la cámara. Juan, acompañado de su inseparable guitarra, trajo consigo una elegancia serena que quedó perfectamente reflejada en cada imagen. Y Obdulia, como bailarina, coreógrafa y alma de Flamencuria, nos impresionó con su capacidad de plasmar en cada pose la fuerza, el sentimiento y la pasión que la caracterizan.
Bajo la mirada de Kiko Castro, cada detalle fue cuidadosamente capturado, desde la conexión entre los artistas hasta la atmósfera mágica que llenó el estudio. Fue una sesión fantástica que sirve como adelanto visual de lo que será su próximo estreno el próximo día 11, a las 19:00 horas, en la Ermita de San Miguel, en La Laguna.
